El 27 de febrero de 1933, los Nazis pusieron el edificio (Reichstag) del parlamento alemán en Berlín a fuego y este fue destruido totalmente (en la izquierda). El 27 de febrero, 1933, era precisamente la fecha cuando el cheque de las oficinas centrales de IG Farben había llegado a las cuentas bancarias nazis (ve la carta a página de enfrente).
En otras palabras: al mismo día en que las sociedades anónimas alemanas más grandes, IG Farben, hicieron su primera inversión financiera estratégica en la fiesta nazi, estos elementos sin escrúpulos organizaron un golpe de estado político para apoderarse de poderes dictatoriales.
Y había aquí su plan maestro: el fuego de Reichstags fue culpado por los Nazis inmediatamente sobre / a sus adversarios políticos. Los medios masivos de comunicación alemanes - partidarios ya incondicionales de los Nazis - apoyaron esta cacería de brujas.
Las leyes de Enabling, que concedían poderes dictatoriales al gobierno nazi, ya estaban preparadas y listo para ser promulgado. El 24 de marzo de 1933, los Nazis aprobaron el primero de estas leyes muy importantes, que convertiría la democracia alemana en una dictadura.
Esta ley fue dada derecho "Ley de seguridad de patria".
Article 5 de esta ley contenía la condición de que esta ley dictatorial expiraría cuatro años después, al 1 de abril de 1937. Por supuesto, los Nazis nunca tenían una intención de dejar sus poderes dictatoriales expirar en cualquier momento.
Los Nazis sabían, que la aprobación del pago de IG Farben enorme, hico su orden claro: prepárese para la guerra y para la conquista militar de los campos petroleros y las fábricas químicas del mundo.
